Allá por el año 1990, con la iniciativa de Giovanni Iazurlo y su esposa Michelina Franco, comenzamos una búsqueda de chicos entre 6 y 10 años, con el fin de formar un grupo de danzas folklóricas molisanas.
En muy poco tiempo se acercaron algunos chicos y comenzamos así los ensayos, debutando por primera vez el 9 de septiembre de ese mismo año en la fiesta de la Virgen de la Salud, que se festejaba tanto aquí como en Castelmauro (Italia), lugar de origen de los fundadores del grupo.
Y así fue como comenzamos a transmitir nuestras tradiciones y cultura a través de los bailes y trajes típicos.
Nuestra mayor satisfacción es ver en cada uno de nuestros espectáculos las miradas de aquellos inmigrantes reflejando la alegría de recordar sus tradiciones a través de los bailes, canciones, dialectos y trajes típicos. Muchas veces ojos llenos de lágrimas por la alegría y al mismo tiempo, la emoción y la nostalgia por el tiempo pasado y el recuerdo de su pueblo y sus amistades.
En muy poco tiempo se acercaron algunos chicos y comenzamos así los ensayos, debutando por primera vez el 9 de septiembre de ese mismo año en la fiesta de la Virgen de la Salud, que se festejaba tanto aquí como en Castelmauro (Italia), lugar de origen de los fundadores del grupo.
Y así fue como comenzamos a transmitir nuestras tradiciones y cultura a través de los bailes y trajes típicos.
Nuestra mayor satisfacción es ver en cada uno de nuestros espectáculos las miradas de aquellos inmigrantes reflejando la alegría de recordar sus tradiciones a través de los bailes, canciones, dialectos y trajes típicos. Muchas veces ojos llenos de lágrimas por la alegría y al mismo tiempo, la emoción y la nostalgia por el tiempo pasado y el recuerdo de su pueblo y sus amistades.
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